No creáis que no me ha costado contenerme aguantar hasta hoy para hablar de esta película, sin ninguna duda una de mis preferidas y la que da titulo a este blog, una de las mejores películas de terror de todos los tiempos y la que lanzó definitivamente al estrellato al bueno de John Carpenter.
Junto a La Matanza de Texas de Tobe Hooper son las dos obras que marcan el nacimiento de la edad de oro del genero slasher, influenciadas por Psicosis de Alfred Hitchcock o Profondo Rosso de Darío Argento sacudieron a la audiencia e inauguraron un torrente de películas del estilo que inundaron las salas de cine primero y las estanterías de los videoclubs después.
Nos cuenta la historia del psicópata Michael Myers, recluido en una institución mental desde que a la tierna edad de 6 años una noche de Halloween asesinará a su hermana mayor, en la víspera de Halloween el psicópata escapara del sanatorio mental donde esta recluido volviendo a su ciudad natal, Haddonfield donde empezará a matar de nuevo, el Dr Sam Loomis (Donald Pleasence) será el encargado de seguirle la pista y detenerle, también conoceremos a la joven Laurie Strode (Jamie Lee Curtis), quien será perseguida por el psicópata.
Rodada en apenas 2 semanitas en las calles de Pasadena y con un escaso presupuesto de 320.000$ consiguió una recaudación espectacular de mas de 60 millones de dólares lanzando al estrellato a su director John Carpenter y a la protagonista Jamie Lee Curtis, hija de los conocidos Tony Curtis y Janet Leigh, en un principio la película debía llamarse The Babysitter Murders pero acertadamente se decidió ambientarla la noche de Halloween y titularla simplemente como Halloween, ha quedado demostrado que fue todo un acierto, también es curiosa la historia de la ya famosísima mascara del asesino, se cuenta que uno de los encargados de vestuario entró en una tienda de disfraces y compró la mascara mas barata que encontró, una blanca de William Shatner, el Capitan Kirk de Star Trek, el resto ya es história.
Las claves del éxito de Halloween son muchas y variadas, para empezar consigue mantener unas altas dosis de tensión durante todo el metraje, la forma en la que Carpenter sugiere y esconde a nuestro psicópata, le hace aparecer un momento en segundo plano para luego hacerle desaparecer de nuevo nos mantiene en tensión de saber que el asesino esta acechando aunque no le veamos y nuestros ojos se muevan nerviosos por la pantalla intentando averiguar por donde aparecerá, también contribuye a aumentar la tensión la acertada y minimalista banda sonora compuesta por el propio Carpenter sintetizador en mano, otra de las claves es la nula utilización de gore, y la casi anecdótica aparición de sangre, apenas podemos verla en la secuencia inicial en el largo cuchillo con el que el joven Michael Myers asesina a su hermana, esta secuencia inicial, rodada desde los ojos del niño psicópata enfundado en una mascara me parece una pequeña obra maestra dentro de la gran película de la que estamos hablando, también resulta inquietante que nunca se nos muestren los ojos del asesino, logrando así reforzar la idea de que nos encontramos ante un ser puramente malvado, muy poderoso y al que se le intuyen incluso poderes sobrenaturales.
Seguramente será la mejor opción para ver esta noche de Halloween si gustas del cine de terror de verdad, evidentemente si no la has visto no puedes dejar pasar un minuto mas sin conseguirla y darle una ojeada, yo te aseguro que no te arrepentirás.
P.D: Me gustaría recomendaros a todos el especial John Carpenter de Marte escrito por mi amigo Diego Cuevas para la revista JotDown, lectura indispensable y que suelo utilizar cuando deseo reseñar alguna película del Maestro.